domingo, 29 de abril de 2007

...satanás




-Quiero ir con papá-dijo.
-No temas -le respondió-.¿Qué te duele?
-Me duele todo-añadió ella, y de pronto una sonrisa le iluminó el rostro.
-Te curarás-dijo él-. Reza.
-He rezado mucho y no me ha servido de nada -continuaba sonriendo-. Rece usted y ponga en mí su mano. Lo he visto en sueños.
-¿Cómo me ha visto?
-He visto que usted me ponía la mano sobre el pecho, así-le tomó una mano y se la apretó contra elseno-. Aquí.
El le cedió la mano derecha.
-¿Cómo te llamas?- le preguntó, temblando de los pies a la cabeza, sintiendo que estaba vencido y que el deseo lúbrico se había escapado de su dominio.
-María. ¿Por qué?
Ella le tomó la mano y se la besó repetidamente. Luego le pasó un brazo por la cintura y lo apretó contra sí.
-¿Qué haces?- dijo el-. María, eres satas.
-Bueno, supongo que no importa.


"EL PADRE SERGIO"
León Nikolaievich Tolstoi

No hay comentarios.: